Esto no tiene nombre

Claramente haciendo alusión al programa de denuncias de TVN quiero hacer mi propia denuncia y descargo ante la impotencia que me da la situación que vivió mi querido Agustín, ese hombrecito por el cual río y lloro, subo a las nubes y bajo a la tierra, ese que hace que todo me llegue el doble y el triple cuando veo las noticias, ese que me da alas para nadar contra la corriente y querer hacer algo por entregar un mundo mejor. En fin, sin más preámbulo les cuento:

El miércoles en la noche mientras preparaba clases y me alistaba a dormir en "ciudad de paso", recibí una llamada de mi mamá donde entre otras cosas me contó que agustín se había caído caminando por una calle céntrica y se había pegado fuerte en el brazo, había llorado harto pero la verdad no le tomé tanta atención a su golpe porque pensé que era un golpe más. Al otro día viajé a Talca y mientras estaba en el bus mi mamá me llama de nuevo y me pregunta a que hora llegaba porque agustín había amanecido con su brazo hinchado y había dormido pésimo así que le había pedido hora al doc. Yo me empezé a preocupar y el viaje de verdad que fue eterno, hasta que llegué a la clínica antes que mi mamá y mi gordo, esos 20 minutos de espera fueron más eternos que la hora y media de viaje que me había mandado hasta que vi llegar a mi gordo con su brazo derecho hinchadísimo al extremo que parecía que tenía elefantiasis y la gente se daba vuelta a mirar su brazo, él digno y serio con carita de susto y su brazito dobladito y tieso! yo le decía; hijo, muéstrame tu bracito, pero él no estaba ni ahí con hacer algún intento por mover su brazo y en esa dinámica de pedirle y no pescarme estabamos cuando tocó el turno de agustín previa radiografía. La doctora vió su brazo y no puso buena cara, vió la radiografía y aunque trató de poner su voz más serena me traspasó con sus getos y miradas ese "cómo se lo digo". Antes que siguiera interrumpí con un: hay doctora, no ponga esa cara que me asusta!, y ella responde: es que es como para preocuparse, Agustín tiene el brazo quebrado en 2 partes y las dos son bien profundas, yo opino que hay que operarlo pronto pero topamos en la edad porque solo tiene 3 años y estas operaciones con anestesia general, placas y pernos es recomendable para niños de 5 años hacia arriba, o 4 por último, pero 3... no sé, hay que hacerlo, pero es desición de usted...

Yo puse cara de pánico y mis ojos de inmediato se empezaron a nublar y a salir mil lágrimas por segundo. Hay doctora es que no quiero que lo operen! no pensé que podría ser pa tanto, me da miedo la anestesia general, me da miedo que agustín tenga alguna reacción alergica en la operación como el hijo de la Susana Rocatagliatta, puede que se ría pero Agustín es alergico a todo! (maldito don que le heredé), es alergico al sol, le da alergia algunas comidas muy pesadas, le da alergia alimentos con alta carga de yodo, además no quiero pernos ni placas de nada en su brazo, no quiero verlo llorar ni dopado, ni nada.

Me pegaron en lo que más duele; mi hijo. De inmediato vinieron los sentimientos de culpa. Por que a mi hijo, porque no a mi, porque tan chico, porque no lo acompañé yo al centro, porque tenía que estar lejos esa noche, porque mi mamá tuvo que pasar esa mala noche con él, porque no yo, porqué trabajo tan lejos, será mejor estar cerca de Agustin aunque no tenga trabajo pero priorizarlo a él?, es mejor priorizar un trabajo que un hijo?, en fin... siempre he creído en el poder del destino, y cuando la vida te quiere dar sustos y lecciones te los dará igual, siempre el destino encuentra alguna forma de mostrarse y prefiero quedarme con esa visión de las cosas. Cuando las cosas estan por pasar pasan igual.

Al final a Agustín lo enyesaron para dejar su bracito quieto hasta el martes. Ese día le sacaran el yeso y le sacaran otra radiografía, ahí sabremos si lo operan u ocurre un milagro. Si los tejidos que rodean sus huesitos se regeneran un poquito, si se regeneran aunque sea una milésima de milímetro dijo la doctora que habían esperanzas y así no sería necesario operarlo, tal vez tendría yeso por un buen tiempo, pero no lo operarían. Y como la esperanza es lo último que se pierde por ahora estamos pensando positivo y ni les cuento cuantos pilatos, rezos y mandas hemos hecho.

Apenas pase esto me preocuparé de demandar a la municipalidad, seguramente no lograré nada pero al menos quizás logre que más adelante en vez de priorizar proyectos como un paseo peatonal o la restauración de una plaza, al menos arreglen las calles del centro para que no ocurran tragedias aún mayores. Piensen qué hubiese ocurrido si en vez de caerse Agustín se hubiese caído una señora embarazada o una señora con una guaguita en brazos?

Esto no tiene nombre.....

(Al mal tiempo buena cara, por lo mismo hace un rato Agustin con mi sobrino, hermano y yo pintamos su yeso y quedó de pelos)