domingo, 30 de septiembre de 2007

La vida perfecta no existe...


Descubrirse a sí mismo debería ser una de nuestras primeras obligaciones; sin embargo es uno de los desafíos más difíciles de lograr porque siempre estamos cambiando. Es como buscar la tierra prometida, una peregrinación que no termina nunca.

Muchas personas tienen ese anhelo (me incluyo).

Poder conocernos profundamente, descubrir lo que queremos, lo que incluye un viaje hacia nuestro interior... (cuesta menos un viaje a la luna...)

Así mismo, para lograr un amor pleno, íntegro - otra gran aspiración de los seres humanos -es necesario, primero, conocernos y aceptarnos a nosotros mismos, y asumir la propia realidad con el propósito de que nuestras expectativas no nos sobrepasen. Solo eso permitirá aceptar también al otro con su propia realidad.

No es la idea parecer la Diosa del amor, la consejera amorosa, o la sabelo todo en cosas del cuore...de hecho no se nada y creo que como nunca he tenido la experiencia de un amor recíproco es desde ese corazon herido desde donde hablo y me quejo, y sueño con ese amor correspondido que sepa Dios si existe, y si existe en algun lado sepa Dios si nos encontramos...quizás pasemos por al lado sin darnos cuenta que realmente eramos el uno para el otro...(eso me sonó como al final de la película "el efecto mariposa")


¿Existirá ese principe azul como ese que sale en los cuentos, que recorre el mundo buscando mujeres con tus características y lucha contra esos dragones gigantes (llamados "miedos" ) para por fin ver a su amada?


El amor nunca pierde la esperanza...sin embargo no soy de las que cree que para ser completamente feliz uno debe tener a "un hombre al lado"...yo ya soy feliz, claro, quizás con un compañero podria ser más feliz aún...pero la vida perfecta no existe...

miércoles, 26 de septiembre de 2007

El pasado tiene la palabra


Pasado pisado. Me encantaría decir eso, pero no sirvo para vivir el presente. Siempre mis recuerdos y experiencias me pasan la cuenta. Vienen de vez en cuando a visitarme ciertos fantasmas que pretenden asustarme y lamentablemente a veces lo consiguen.

Estoy clara que uno no debe condenar el futuro por nuestras experiencias pasadas, y aunque a veces aparecen ilusiones que iluminan mi camino finalmente siempre resultan ser estrellas fugaces que así como aparecen desaparecen. Pero siempre uno se las ingenia para salir pronto del paso.

Una de las actitudes que tenemos los seres humanos para asumir ciertas situaciones de la vida pueden ser calificadas como "épicas", en el sentido de que demanda de nosotros respuestas que implican sortear peligros, vencer obstáculos, hacer sacrificios, renunciar a lo cotidiano, aventurarse en lo desconocido...esto último llama mi atención, aunque la verdad también me asusta porque ciento que tengo tan poco que por lo mismo me rehuso a perderlo...


Me gustaría subir a la punta de un cerro y gritar: ¡Todo no es más que lejanía!!! y vivir del lema: "No tengo nada que perder".




Será que hay que intentarlo...???

viernes, 21 de septiembre de 2007

Nuestra limitada libertad


Acabo de leer el blog de un extraño amigo que me hizo reflexionar sobre la palabra libertad...


Pienso que no hay libertad que pueda llamarse libre si no se respetan las libertades (cualquiera sea su forma de gobierno). Sin embargo ninguna lo será completamente si no existen en ella esas libertades en forma absoluta y sin restricciones. La única libertad que merece ese nombre es la de buscar nuestro propio bien de nuestro propio modo, a obligar a todos a vivir como los demás creen que es mejor.

Cuesta dejar solamente la verdad de sí mismo, que no se llama gloria, fortuna o ambición, sino libertad. Si así fuera yo sería al fin aquella que imaginaba cuando niña, y hasta incluso les hubiese exigido a ciertas personillas (y a otros proclamado) la verdad ignorada.


"Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien". (Frase de Luis Cernuda)


Creo que el crecer en un sistema entre comillas demócrata a hecho que mi concepto de libertad sea limitado. Decir que me siento o me he sentido libre sería engañarme a mi misma. Sería una farsa tan grande como el mito que en Chile ya no hay pobreza, porque muy adentro mio se que siempre he estado presa. Presa de mis pensamientos, presa de los sentiemientos, presa de las multitiendas, presa incluso de los medios de comunicación que elijen lo que nos quieren mostrar (EJ: Los Angelini, Los Luxi, los Piñera...etc).



Quizás la libertad me haría olvidar mi mezquina existencia.


La libertad del amor es la única que algo me exalta. La única libertad porque muero.








La libertad absoluta se burla de la justicia. La justicia absoluta niega la libertad.




lunes, 17 de septiembre de 2007

LA NECEDAD - LA RECONSTRUCCIÓN



Los días han vuelto a convertirse en rutina, y es raro decirlo en estas fechas donde todo el mundo tiene panoramas. En cierta parte es mi opción, no quise ir a la cordillera con mi familia y preferí quedarme sola en casa augurando traquilidad de día y actividad en la noche. Pero nada de eso funcó y me encuentro sola, triste y abandonada. Y es más, hasta el celular lo prendo a ratos sólo para ver la hora cuando mi reloj mental falla.


Me preguntaba qué pasa cuando tu vida cotidiana pasa a ser una tarde de domingo. Cuando ya no hay distinción entre días porque ya ves todos los días iguales; sin pedir cosas importantes y sin exigirnos más de lo que queremos dar. Cuando abanadonamos las fantasías que teníamos de chicos y conseguimos realizarnos personal y profesionalmente.


Supongo que lo asociamos a la "madurez", nos sorprendemos cuando alguien de nuestra edad dice que quiere todavía esto o aquello de la vida. Pero consciente o inconscientemente sabemos que lo que pasó fue que renunciamos a luchar por nuestros sueños, dejamos de lado esas fantasías, metas o aspiraciones que parecían locas por una vida absolutamnete terrenal y racional. No nos damos cuenta de lo entretenido que se vuelve la magia y el misterio de los sueños. No nos percatamos que todos los caminos son mágicos si nos llevan a nuestras aspiraciones.


La inmovilidad ante el peligro es necedad.









Hay que trabajar en la reconstrucción de lo que se ha hechado a perder. Trabajar activamente para unificarlo y llegar a un orden, a el equilibrio que solemos perder. Hay que sopesar exhaustivamente la manera de reconstruir lo corrompido y evitar sentir que otros entran a saco por nuestros sueños.

jueves, 13 de septiembre de 2007

HAGAMOS EL AMOR Y NO LA GUERRA


Me siento rara al osar escribir en un blog... siempre he pensado que esto es para tipos que la llevan escribiendo, yo soy solo del monton, de hecho siempre lo he sido y no crean que espero que mi vida cambie despues de esto...si quisiera ser reconocida ya habria hecho algo como para que las futuras generaciones se hubieran visto obligadas a estudiar mi biografia...no sé porque en vez de que se me venga a la cabeza personajes como Adriana Barrientos, Delfín, o René de la Vega se me viene a la cabeza Bush ( y uno que otro personaje de nuestra izquierda lunática que se llena la boca hablando del anti - imperialismo y el capitalismo y apenas tienen la oportunidad se venden por plata que llega en dólares a nuestro país).


En fin...no quiero mezclar los temas...que por lo demás son sentimientos encontrados, ya que yo (por si no saben)milité en el partido socialista, y una q otra vez participé en alguna protesta de mi querida U de conce, y todos sabemos el sello que tiene esta Universidad...(o mas bien que tenía ya que hoy en día la federación está presidida por un tipo de derecha muuuuy mimetizado con Lavín).


Bueno, esta especie de ensayo, el cual es el primero (y quizas el último, uno nunca sabe), a pesar de ser hecho previo a las fiestas patrias no pretende tocar temas patrioticos, si no pretende crear un espacio de reflexion sobre la fama...y más que sobre la fama, sobre ese ego de ciertos personajes que lo único que quieren es ser reconocidos por la humanidad compuesta ya no por humanos, sino por humanoides, androides, alienígenas, etc. y es que definitivamente nuestra raza humana está alterada, ya nada es lo de antes, es cosa de pensar en las guerras...

justifico las guerras, pero las de antaño, las guerras de conquista, ya que había mucha tierra por conquistar y mucho por hacer. Sin embargo hoy las guerras se han vuelto sinónimo de "poder", el egocentrismo llega a tal punto que ya no importan las vidas que estén en peligro, solo les importa que su nombre sea recordado por la humanidad, formar parte de esa "línea de tiempo" que uno hace en el colegio, siendo que el verdadero campo de batalla está en nosotros mismos, nace ahí el bien y el mal. Así y todo en las guerras antiguas los guerreros no luchaban sólo por el fin de conquistar. Claro, hablar de guerreros, es imaginarnos inmediatamente a un tipo sudado y sucio con una mirada ardiente y sedienta de conquista, pero no me cabe duda el tremendo orgullo que guardaba en su corazón ese guerrero. Al fin y al cabo no les importaba ni la victoria ni la derrota, porque la escencia de la guerra no se centraba en el resultado, iba más allá de eso; era pasión, y en la pasión no importa el resultado, sea el resultado que sea la pasión de igual forma estará...







lAS personas luchamos por nuestra existencia, no afirmamos ser perfectos, sin embargo vamos perdiendo nuestro brillo buscando ser la estrella que deseariamos ser.